Gustave Flaubert
Gustave Flaubert nació el 12 de diciembre de 1821 en Rouen, siendo sus padres el cirujano jefe del Hotel-Dieu, Achille-Cléophas y Justine-Caroline, hija de médico a su vez.
Tuvo dos hermanos, uno mayor que él, Achille y una hermana menor, Caroline.
Mención distinguida merece otro miembro de la familia, que aunque sirvienta, entró en la casa cuando él tenía cuatro años y le acompañó toda su vida, muriendo después que el novelista, la fiel Julie, transformada por el escritor en Felicité personaje de Corazón simple.
En un ambiente consagrado a la medicina, resulta extraño que Flaubert eligiera la literatura en la que empezó a edad temprana –en 1835, publicó Voyage en enfer-, efectuando años más tarde, unos truncados estudios de derecho, carrera que, por consiguiente, jamás llegó a ejercer.
(Un detalle importante en la vida de Flaubert es el que hace referencia a sus crisis nerviosas que empezaron a los veintitrés años).
Aunque de Rouen, acabará residiendo de manera permanente en Croissete; Gustave Flaubert viajó mucho a lo largo de su existencia, tanto por su patria como por Egipto, Asia Menor, Turquía -viajes de los que sacaría documentación para escribir su novela Salammbó- , Grecia e Italia.
En enero de 1846, fallece su padre y en marzo del mismo año su hermana Carolina, ya casada, y que dejó una hijita del mismo nombre. Este año es muy importante en la vida de Flaubert pues conoce a Louise Colet, poetisa, con quien mantendrá una relación fluctuante a lo largo de toda su vida, rupturas, reconciliaciones; es célebre su mutua correspondencia y también los amores que Louise Colet mantuvo con Musset y De Vigny, entre otros.
Pero el gran amor de Flaubert fue Elise Schléssinger, once años mayor que él, y a quien conoció adolescente, amor románticamente platónico que sería bendecido por la literatura al convertirla el escritor en un personaje de la Educación sentimental, muchos años después.
Antes de Louise Colet, tuvo amores, cortos pero nada platónicos, con Eulalia Foucaud de Langlade, y en su viaje por oriente escarceos amorosos con una famosa cortesana egipcia Kuchuck-Hanem. Tiempo después amaría a distancia y respetuosamente a la princesa Mathilde, descendiente de un hermano de Napoleón Bonaparte
El último romance conocido del escritor fue Juliet Herbert, institutriz de su sobrina Carolina, relación sumamente discreta y que pasó casi desapercibida.
Sin embargo, como el verdadero amor de cualquier novelista es su obra, se puede afirmar que las mujeres más importantes de su vida fueron Madame Bovary y Salammbó, aunque por distintos motivos.
(Al respecto de Madame Bovary existe una curiosa anécdota que tiene que ver con el suicidio de la heroína; cuando Flaubert describía ese momento llegó a sentir en la boca el sabor del arsénico y acabó vomitando).
Madame Bovary, fue su novela-escándalo que le valió en 1857, un sonado proceso en el que se le tacharía de inmoral, lo cual le amargó bastante.
En cuanto a Salammbó, empezada en septiembre del mismo año, fue la desintoxicación del mundo Bovary, y sus secuelas, ya que ni la época, ni los personajes eran contemporáneos.
Tendríamos que detenernos ahora un momento para hablar del Flaubert novelista y su minuciosa, y lentísima, manera de escribir, a veces a capítulo por año, ya que en ocasiones se pasaba un día entero para mover una coma de sitio y procuraba siempre que sus textos no contuviesen palabras repetidas. Él acostumbraba a leer en voz alta para sí mismo, cuanto escribía, porque escuchándose encontraba más fácilmente los defectos. –Por otra parte, recomendación muy oportuna que hacer a cualquier escritor sea novel o consagrado, ya que la literatura contiene una música especial que conviene oír con detenimiento-.
Gustave Flaubert fue una persona que tenía en alto concepto la amistad como así lo demostró con amigos que se mantuvieron hasta la muerte, por ejemplo, Máxime du Camp, George Sand, Ivan Turgueniev, por citar sólo algunos.
Entre su extensa obra destacan La tentación de San Antonio, La educación sentimental, Memorias de un loco, Correspondencia, Bouvard y Pécuchet y Diccionario de los lugares comunes, estas cuatro últimas, obras póstumas.
En 1866 al escritor le dan la Legión de Honor, lo que equivale a un desagravio en cierto modo. En abril de1872 fallece su madrel, y en 1876 Louise Colet, a la que sigue, en junio del mismo años George Sand. Flaubert las sobrevivirá a todas ya que deja este mundo de un ataque cerebral, el 8 de mayo de 1880 en Croissete donde reside, siendo enterrado el día 10 del mismo mes, en el cementerio de Rouen, con grandes elogios fúnebres por parte de Goncourt y Emile Zola.
Gustave Flaubert debe principalmente su fama a Madame Bovary, pero él no creó un arquetipo de mujer, ni el bovarismo, la mujer adultera por aburrimiento y exceso de imaginación; Emma Bovary ha existido siempre y seguirá existiendo, en todo caso, Flaubert lo único que hizo fue llevar al mundo de la novela a un tipo de mujer completamente real, lo cual no significa que ello le reste mérito al autor, primero en “descubrir” a este personaje femenino.
© 2002 Estrella Cardona Gamio